Vivir el presente en una boda

1 SHOT, 1 QUOTE.

Un único plano, con una única frase. 
La dijo Nacho en la pedida. Sip, tuve la fortuna de estar en ese momento, en casa de la novia, con los padres y hermanos. La pedida de mano es un momento muy íntimo y personal donde se empieza a dibujar conjuntamente el día de la boda, un borrador de las emociones que se vivirán, y quizá el momento y el lugar en que verdaderamente nace una nueva familia. 
Aunque la familia también puede nacer precisamente en el momento en que Nacho y Mery, conduciendo un coche antiguo, con el maletera repleto de historias y legados,  dejan atrás a todas aquellas personas que les han acompañado hasta ese momento de sus vidas, convirtiéndoles en quienes realmente son en aquella mañana de finales invierno. Ahí va otro mensaje escondido: la primavera está a punto de llegar para ellos.
Pero volvamos a la frase de Nacho (citando, en realidad, a su propia madre y a las lecciones aprendidas). Esa frase me ha acompañado desde entonces. Estoy convencido de que mi propia madre me daría el mismo consejo ahora mismo, si pudiera. En las bodas se aprende mucho de la vida, siempre lo he dicho. 
Ahora mismo somos Marta y yo, sentados al volante de un pequeño coche blanco, quienes siguen adelante, día tras día, boda tras boda, dejando atrás cientos de parejas recién casadas que nos han ayudado a entender el matrimonio, la familia, el mundo.
Por Mery y Nacho, y por todos vosotros: ¡salud!